Agostino Bonalumi fue un pintor italiano, considerado una de las figuras más relevantes del arte abstracto del siglo XX.
Nace el 10 de julio de 1935 en Vimercate, en la provincia de Monza. Segundo de 4 hijos, antes que él la hermana mayor Rosa y luego los dos hermanos menores, Teodoro y Pier Enrico. Agostino Bonalumi, desde muy joven, ayuda a su padre pastelero para el sustento de la familia y al mismo tiempo asiste a la escuela obligatoria.
Una vez terminados los estudios, Agostino Bonalumi comienza a mostrar interés por el arte, definiéndola él mismo como una manera de conocer el mundo. Cuando no trabaja, pinta y busca continuamente exponer sus obras, hasta 1957, cuando por primera vez organiza una exposición personal en la Galleria Totti de Milán.
En los dos años siguientes, frecuentando el conocido barrio de Brera en Milán, el artista conoce a Enrico Baj, fundador, junto con Sergio Dangelo, del llamado Movimento Arte Nucleare, nacido en 1950. Fue precisamente Baj quien le presentó a Enrico Castellani y Piero Manzoni, con quienes Agostino Bonalumi funda la revista de arte Azimuth en el '59. La revista saldrá en solo dos números, el primero en 1959 y el segundo en el siguiente 1960.
Siempre en 1959, la colaboración entre los tres artistas se interrumpe por motivos personales. En este período, el pintor comienza a aparecer con una propia individualidad artística. Es a finales del mismo año cuando aparece por primera vez la tela extroflexa. Las extroflexiones son la expresión de un arte que no solo se deja mirar, sino que crea una ilusión de movimiento con su plasticidad, y parece también querer ser tocada, para llevar al observador al descubrimiento de la tridimensionalidad y, por lo tanto, de la complejidad del mundo. El juego de claroscuro que los pintores utilizaban para conferir profundidad aquí trasciende la ilusión para volverse concreto e innegable. Un arte que trasciende la apariencia y todas sus teorías para mostrarse por lo que realmente es: una conjunción de sensaciones visuales que, desde el plano figurado, invaden el espacio del espectador haciéndose copartícipes de su propia realidad.
En 1961, el pintor, que se había convertido en una promesa del arte italiano gracias a su participación en numerosas exposiciones internacionales, se casa con Giuliana Oliva, a quien conoció en el lugar de trabajo al que aún no puede renunciar. Ese mismo año decide, apoyado por su esposa, dedicarse exclusivamente al arte y en el '64 firma su primer contrato con Arturo Schwarz, exponiendo en la inauguración de su galería al año siguiente.
En 1967, durante la exposición "Lo spazio dell’immagine", Bonalumi expone su primer ambiente denominado Blu abitabile. Emblema de la naturaleza única y original del pensamiento de un artista casi filósofo, esta creación se encuentra en la intersección entre escultura y arquitectura, sin posibilidad de separar estos dos mundos. Construida sobre una base circular, la impresión inmediata es la de un arte que se convierte, como sugiere el título, en ambiente. Se vuelve por lo tanto habitable. Y lo hace de una manera que parece acoger al observador envolviéndolo en su nota monocromática. La pared está salpicada de extroflesiones que, sucediéndose de abajo hacia arriba, crean un efecto de ilusión óptica y casi una percepción táctil, favorecida también por el suelo lenticular.
En la vida privada, Agostino Bonalumi intenta llenar las lagunas de su trayectoria educativa, que se detuvo en la escuela secundaria, estudiando filosofía y mostrando un interés particular por la fenomenología.
Desde principios de los años 70 hasta finales de los años 80, el artista crea una nueva serie de obras definidas como "a griglia" que se desarrollarán hasta 1989.
Llegado a 1990, y agotado el ciclo de las obras en cuadrícula, Bonalumi reelabora el concepto de extroflección basado en una estructura de acero que parece casi cobrar vida.
En 2002 también se le otorga el premio "Presidente della Repubblica" otorgado por la Accademia di San Luca de Roma.
En los años siguientes, continúa su actividad artística llegando a producir sus últimas obras con la técnica del varillaje de acero.
Enfermo desde hace tiempo, Agostino Bonalumi muere, a consecuencia de un colapso, el 18 de septiembre de 2013.
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