Así nacen alrededor de 1963 las llamadas gráficas banales en las que se representaban motivos cotidianos de la publicidad y los medios de comunicación, como mujeres desnudas, automóviles o astronautas.
A mediados de los años 60, Brehmer comienza a reproducir en sus grabados el sello postal, que el propio artista define como organismo autoritario con definición cultural de poder. A partir de mediados de los años 60, el artista se convierte, junto con Konrad Lueg, Sigmar Polke, Gerhard Richter y Wolf Vostell, en un importante representante del realismo capitalista.
En los años 70, Brehmer desarrolla un nuevo grupo de obras, el llamado trabajo esquemático, en el que se elaboraron colores, mapas y estadísticas. En estas obras, se ocupa de la interpretación y el significado del color como símbolo (Farbengeografien, Ideale Landschaft, Farbmuster) y creó cartas y mapas de gran tamaño para representar el fascismo (Hitler's Rede, 1973), la amenaza comunista (Lokalisierung von Rotwerten, 1972), el daño ambiental (Skyline).
En los últimos veinticinco años de su vida se dedica a la enseñanza. En particular, desde 1971 hasta 1997 fue profesor en la Hochschule für bildende Künste de Hamburgo, una de las ciudades que lo adoptaron durante su carrera. Además, en 1987 y 1988 fue docente en la China Academy of Art de Hangzhou, otra experiencia que le permitió darse a conocer a nivel internacional.
Klaus Peter Brehmer muere en Hamburgo en 1997.